Superman returns

La historia es más o menos ésta:
Superman se va del planeta por cinco años a ver si en Kripton quedan sobrevivientes. Durante su ausencia el mundo sigue girando y a su regreso encuentra varios cambios. Primero, Clark Kent vuelve al diario El Planeta y Lois Lane se ha ganado un Pulitzer por su artículo Por qué el mundo no necesita a Superman, está casada y tiene un hijo y Lex Luther está libre.
El desarrollo de la historia es potente, engancha desde un inicio y te mantiene pendiente de la acción. Es rápida y entretenida. Los personajes están bien logrados y convencen.
A Brandon Routh no le queda grande el traje y gracias a Routh, Superman toma una faceta más dulce, más coqueta y galán sin dejar la rudeza en segundo plano.
Kate Bosworth es Lois Lane, la eterna enamorada de Superman, la reportera estrella que jamás logró olvidarlo. La dulzura de su cara le da un aire angelical a la ruda Lois que no toma en cuenta a Clark y Bosworth lográ convencernos de que Lois ama a Superman por sobre todo.
Kevis Spacey es lex Luther y no podíamos esperar menos de él. Interpreta majestuosamente el papel; la maldad le brilla en los ojos y se manifiesta en cada palabra y en cada gesto. Tiene todo friamente calculado y a ratos se roba la película.
Accidentes monumentales sin un rasguñado, Superman salvando hasta al gatito arriba del árbol o volando a grandes velocidades sin despeinarse y con el rulito en la frente (que lo diferencia de Clark) siempre intacto, la puesta en escena, los efectos especiales, los actores, la trama, en fin la película es buenísima, no se la pueden perder y la recomiendo a ojos cerrados a todos aquellos que gustan de los super héroes o de una buena historia.

De apellido Cuevas (ésta no la cuento dos veces)

Yo pensé que nunca me iba a pasar; error número 1. La confianza que se tiene en el metro cuadrado que te rodea es vulnerada sin que te des cuenta, basta una fracción de segundos, un descuido mínimo (ínfimo en realidad) para que los desgraciados e infelices lanzas (se merecen un par de improperios en realidad) se lleven tu billetera o tu celular.
Pues bien, estoy segura que en el tramo que va desde que puse el pie en la micro-transantiago hasta el cobrador automático me quedé sin billetera. La rabia y las ganas de putiar a alguien me agarraron de lleno. Revisé mi bolso una, dos, tres, cuatro y más veces para convencerme de que me sacaron la billetera en mis propias narices. Miré al tipo que venía detrás mio, pero el ni me miró y su actitud era extraña, como nervioso. Lo miré, no aguanté y lo encaré: ¡¿Por casualidad no me robaste la billetera?!, pobresito él y que enrabiada estaba yo. Me mostró todo lo que llevaba, pero mi billetera no estaba. Obviamente le pedí disculpas (y lo vuelvo a hacer) mientras toda la gente miraba, pero la rabia no se iba ¡QUERÍA MIS COSAS DE VUELTA! llevense la plata si quieren (que era muy poca) pero devuelvanme mis cachureos.
De todas formas, la falta de palta en mi billetera y el exceso de papeles y cachureos que me sirven sólo a mi, me decían que mis cosas iban a aparecer
Finalmente llegue a mi casa y recibí la llamada del chofer, al cual le encargue mi billetera por si aparecía en la micro, y tenía fe de que iba a ser así, pero nada, ahi no estaba. Después recibí una llamada de mi universidad. Una mujer maravillosa, de la cual voy a estar agradecida toda la vida, llamó allá diciendo que tenía mis cosas (entre ellas mi carnet de identidad que era una de las cosas que me importaba) y que estaban en el centro, a dos cuadras de donde tomé la micro.
Es increible como cambia el ánimo, si hasta me ando riendo sola. Se me quitó la rabia y las ganas de putiar a alguien se esfumaron y me volvieron las ganas de continuar mis panoramas del día.
En verdad, ésta no la cuento dos veces.

¿La Venecia de sudamérica?

Venecia (en italiano Venezia, en veneciano Venexia) es la ciudad de los canales y está situada sobre un conjunto de islas que se extiende en una laguna pantanosa en el Mar Adriático. Desde su fundación la ciudad ha sufrido los efectos de inundaciones periódicas. En la actualidad la ciudad se considera en grave amenaza por las repetidas inundaciones. En primavera y otoño tiene lugar el agua alta dos veces al día y la plaza de San Marcos se inunda de agua hasta tal punto que tienen que colocar pasarelas de madera sobre las que la gente tiene que andar en fila india. El gobierno italiano prepara un proyecto, denominado Moises, para levantar unos diques móviles que se cerrarían en caso de aumento del nivel del agua del mar (es.wikipedia.org).
Si Chile es un país largo y angosto situado sobre continente, con una cordillera hermosa y un mar que baña nuestras costas, ¿¿por qué cresta cada vez que llueve dos días seguidos terminamos como Venecia??. ¿Habrá que culpar al alarife Pedro de Gamboa por trazar mal la ciudad? o ¿a los brillantes arquitectos o el ministerio de Vivienda que emplaza poblaciones donde no se debe y construyen desagües que no soportan lluvias tan intensas?.
En verdad no sacamos nada con culpar a alguien ahora, hay que asumir que este país está mal hecho de norte a sur y de este a oeste, y recomendar a la población chilena, que ya tiene más de 28 mil damnificados desde la región Metropolitana hasta la IX región, que costruyan sus casas como palafitos y/o que adquieran gondolas, botes, lanchas y demases para que se puedan trasladar de un lugar a otro cuando la lluvia inunde sus calles o esperar que el Buque Escuela Esmeralda pase por su comuna y que lo deje en mapocho para que ahí puede encontrar locomoción terrestre que lo deje en su trabajo.
¡Que vergüenza y que rabia que cada invierno suceda lo mismo!

Se acabó, pero no del todo

Ya está casi todo listo, tengo el resultado de dos de cinco exámenes y me eximí del unico eximible. Me ha ido bien, no me quejo; sería muy patudo de mi parte hacerlo.
Lo bueno de esto es que el relajo es total, es istantáneo y fulminante. Llega así como así y es lo más rico del mundo.
De verdad les recominedo a todos los que siguen en exámenes (me incluyo, me queda uno pero relajao, equivale al 10% de la nota) que se saquen la cresta estas semanas, que duerman poco, que estudien harto, que sientan que ya no pueden más, esten al borde del colapso y les aseguro que los resultados serán buenos y que el descaso que vendrá después de todo eso, será lo mejor, lejos lo mejor de las semanas de exámenes.
Suena un poco loco, un poco sin sentido, pero que más da ¿por qué todo tiene que tener un sentido? (incluido este blog, incluida yo)